¿Ya conoces la manera correcta para llevar la gestión de un proyecto? Aquí tienes los 5 pasos esenciales.
¡Hola a todos!
Hoy quería hablarles sobre una guía fantástica, el PMBOK (Project Management Body of Knowledge), que nos brinda las mejores prácticas y estándares para gestionar proyectos de manera eficaz. Imagínense que es como una receta de cocina, pero para proyectos. Nos brinda los ingredientes (conocimientos, habilidades, herramientas y técnicas) y el paso a paso para aplicarlos a nuestras actividades de proyecto.
PMBOK divide la gestión de proyectos en cinco etapas clave: inicio, planificación, ejecución, seguimiento y control, y cierre.
Primero, iniciamos definiendo nuestro proyecto. Aquí nos preguntamos ¿qué queremos lograr?, ¿por qué es importante? y ¿cómo lo vamos a hacer?. Es como visualizar el resultado final de nuestra receta.
Luego, en la etapa de desarrollo del caso de negocio, validamos si nuestra idea es viable. Nos preguntamos: ¿Es rentable?, ¿Qué riesgos hay? y ¿Existen otras alternativas?. Haciendo relación a nuestro ejemplo, sería como verificar si nuestros ingredientes están frescos y si tenemos todo lo necesario para nuestra receta.
En la etapa de identificación de los interesados, hacemos un listado de todos los que se beneficiarán o se verán afectados de alguna manera por nuestro proyecto. Esto incluye a todas las personas involucradas, desde el cliente que nos encargó el proyecto, hasta el equipo que trabajará en él y cualquier otra parte que pueda tener un interés en el proyecto.
A continuación, definimos los objetivos del proyecto. Aquí, es importante recordar que deben se específicos, medibles, alcanzables, relevantes y limitados en el tiempo. Con esto ya tenemos la receta escrita con exactitud, sabiendo qué queremos lograr y cómo sabremos que lo hemos logrado.
Por último, desarrollamos el plan del proyecto. Este es nuestro mapa de ruta que nos guía para alcanzar los objetivos del proyecto e incluye el alcance, el cronograma, el presupuesto, los riesgos, los recursos necesarios y cómo vamos a medir el progreso. Teniendo las instrucciones paso a paso de nuestra receta.
Es importante recordar que cada proyecto es único y puede requerir ajustes o adaptaciones a este proceso, al igual que con las recetas de cocina, a veces tenemos que ajustar las cantidades o cambiar un ingrediente.
Espero que esta información les haya sido útil y les anime a explorar más sobre la gestión de proyectos.
¡Hasta la próxima!
